Entrevista a Pavel Ermolinski:
Hoy entrevistamos a Pavel Ermolinski, actual jugador del UB La Palma.Hijo de padre ruso y madre islandesa, este alero surgió de las canteras del Unicaja Málaga y lleva 4 temporadas disputando la Liga LEB española.
FEDEVANLACKE.COM.AR
Comenzó en las categorías inferiores del Skallagrimur islandés, con cuyo primer equipo debutó con sólo 15 años. En la temporada 02/03 fichó por el IR Rajkiavik. Llegó a España con sólo 17 años tras una temporada en las filas del Vichy francés (03/04). Hace tres años fue la máxima figura del Europeo Júnior, donde acabó como máximo anotador y reboteador del torneo.
Un empezar exitoso, no? ¿Qué nos puedes contar de tus comienzos?
Empecé a jugar en el equipo de mi padre. A pesar de mi corta edad, él confió en mí y me puso a jugar y lo hice bastante bien. A partir de ahí las cosas empezaron a ir para arriba: cambie a un equipo mejor y jugué muchos minutos. También formé parte de las selecciones inferiores y lo hicimos increíblemente bien a pesar de que yo era el jugador más alto del equipo.
En el Europeo, en realidad fui elegido mejor reboteador y pasador del torneo -lo mío no es anotar je je je. Y a partir de ahí recibí llamadas de Europa y de esa forma comenzó mi carrera profesional.
Luego en la cantera del Unicaja, jugaste para el Clínicas Rincón Axarquía en la Leb-2. Y de allí te fuiste cedido a la Leb Oro al Ciudad de Huelva, donde coincidiste con Fede. ¿Qué sentimientos te surgen cuando tienes que jugar contra el equipo donde supongo que tendrás amigos y entrenadores que te vieron crecer?
Fue un partido muy raro y especial a la vez. Jugué contra los chicos con quienes había crecido y compartido muchas cosas. Ganamos muchos partidos juntos y tuvimos una unión especial. Y cuando les vi calentando en el otro lado del campo me entraron ganas de ir a calentar con ellos y sentir otra vez lo vivido jugando con ellos.
En Huelva, jugaste 19 partidos en los que promediaste 2,5 puntos y 3,1 rebotes en 18 minutos de juego. Una lesión (un neumotórax) te obligó a perderte varios partidos a principios de temporada.
¿Qué te sucedió?
Mi temporada en Huelva fue muy turbulenta. Las lesiones y los problemas económicos del club hacían que ir a entrenar y jugar se hiciera realmente duro. Pero a pesar de eso me mantenía optimista. Había una gran unión con mis compañeros, todos nos llevábamos muy bien y eso ayudaba en el día a día. Al final de la liga, ya recuperado, tuve oportunidades de jugar bastante lo que me ayudó a crecer como jugador.
La mayoría de los entrenadores que has tenido te definen como “la polivalencia hecha jugador de baloncesto”: por tu posición natural de “3”, pero tu buen hacer de escolta, y hasta de base. ¿Tú en que puesto te ves?
Hasta los 18-19 años siempre jugué de base, y creo tengo –y tendré– esta mentalidad de base. Pero por otro lado sigo creciendo como jugador en distintas facetas En lo personal, me da igual en que posición juegue. Creo que el baloncesto no cambia con los puestos, el balón sigue igual, la cancha, las canastas, nada cambia. Mientras pueda jugar, no me importa en que posición lo haga. Soy un jugador que si bien no es especialista en nada, hace de todo un poco dentro del campo.
Eres un jugador joven, talentoso con técnica y conocimiento del juego… ¿Qué es lo que te falta para dar el paso a la ACB?
Para llegar a lo más alto del baloncesto hace falta talento y un poco de suerte. Antes la defensa era mi punto débil, hoy por hoy estoy trabajando duro para mejorar ese aspecto y creo que lo estoy consiguiendo. También debo mejorar mi tiro, con un tiro exterior más o menos fiable seré un jugador mucho más completo. Espero poder mejorar esas cosas y tener un poco de suerte para lograr el paso a la ACB.
Ahora estas militando para el UB La Palma y tienes opción a otro año de contrato ¿Qué vez en el Club que te motiva a quedarte allí? ¿Cuáles son los objetivos del equipo?
Creo que el UB La Palma es el equipo ideal para mí porque juego muchos minutos y así puedo desarrollar mi juego. El objetivo del equipo desde principio es lograr la salvación, y creo que estamos cerca de poder cumplir ese objetivo y a lo mejor pelear por algo más.
¿Cómo es Domingo Rodríguez como entrenador?
Es un entrenador joven con muchas ganas y seguro que tendrá una carrera exitosa.
¿Te gusta la Isla?
La isla es muy pequeña y muy bonita. No hay mucho que hacer pero estoy a gusto. La afición nos ayuda mucho cuando jugamos en casa, y eso se refleja en los resultados que tenemos jugando de local donde hemos ganado la gran mayoría de los partidos.
Se viene el choque contra el CB Valladolid, ¿Cómo se están preparando para el partido? ¿Cuál crees que es el punto donde atacar para poder conseguir la victoria?
Valladolid esta teniendo una temporada maravillosa. Tienen un equipo con grandes jugadores que te pueden ganar partidos solos. Es difícil encontrar una manera para ganarles, tenemos que jugar a nuestro mejor nivel y esperar que ellos también tengan un día con menos acierto.
¿Eres de esos jugadores que sigue las distintas ligas y que los domingos mira los partidos de ACB?
Si, soy un fanático del baloncesto. Lo llevo en las venas. Ha sido parte de mi vida desde pequeño, por eso me paso todo el día viendo baloncesto por la televisión.
Nos han contado que tanto amas el baloncesto que hace unos años te has echado de pareja a la hermana de Berni, a quién desde la página aprovechamos a saludar ya que hemos tenido la oportunidad de conocerla en Huelva ¿Cómo es tener de cuñado a una estrella del baloncesto español?
Berni es una persona muy muy amable. Desde que vine a Málaga me ha ayudado muchísimo, incluso a encontrar una novia jejeje. Es una persona familiar y se lleva bien con todo el mundo. Le encanta hacer bromas sobre mi país, aunque estoy seguro que si fuera algún día, lo callaría. Por lo general, no solemos hablar mucho de baloncesto ya que tenemos suficiente los dos con entrenar cada día.
PIN-PON:
Un jugador: Bodiroga
El quinteto de la LEB Oro: Chris Hernandez, Ross Schraeder, Fede Van Lacke, Thomas Terrell, Brian Cusworth.
El baloncesto es para mí: Lo es todo.
Un partido para no olvidar: Mi primer partido jugando con mi padre.
Una anécdota: Un compañero en Francia, una vez se llevo dos zapatillas del mismo pie a un partido. Y el pobre jugo así, no se cómo, pero aguanto.
Comenzó en las categorías inferiores del Skallagrimur islandés, con cuyo primer equipo debutó con sólo 15 años. En la temporada 02/03 fichó por el IR Rajkiavik. Llegó a España con sólo 17 años tras una temporada en las filas del Vichy francés (03/04). Hace tres años fue la máxima figura del Europeo Júnior, donde acabó como máximo anotador y reboteador del torneo.
Un empezar exitoso, no? ¿Qué nos puedes contar de tus comienzos?
Empecé a jugar en el equipo de mi padre. A pesar de mi corta edad, él confió en mí y me puso a jugar y lo hice bastante bien. A partir de ahí las cosas empezaron a ir para arriba: cambie a un equipo mejor y jugué muchos minutos. También formé parte de las selecciones inferiores y lo hicimos increíblemente bien a pesar de que yo era el jugador más alto del equipo.
En el Europeo, en realidad fui elegido mejor reboteador y pasador del torneo -lo mío no es anotar je je je. Y a partir de ahí recibí llamadas de Europa y de esa forma comenzó mi carrera profesional.
Luego en la cantera del Unicaja, jugaste para el Clínicas Rincón Axarquía en la Leb-2. Y de allí te fuiste cedido a la Leb Oro al Ciudad de Huelva, donde coincidiste con Fede. ¿Qué sentimientos te surgen cuando tienes que jugar contra el equipo donde supongo que tendrás amigos y entrenadores que te vieron crecer?
Fue un partido muy raro y especial a la vez. Jugué contra los chicos con quienes había crecido y compartido muchas cosas. Ganamos muchos partidos juntos y tuvimos una unión especial. Y cuando les vi calentando en el otro lado del campo me entraron ganas de ir a calentar con ellos y sentir otra vez lo vivido jugando con ellos.
En Huelva, jugaste 19 partidos en los que promediaste 2,5 puntos y 3,1 rebotes en 18 minutos de juego. Una lesión (un neumotórax) te obligó a perderte varios partidos a principios de temporada.
¿Qué te sucedió?
Mi temporada en Huelva fue muy turbulenta. Las lesiones y los problemas económicos del club hacían que ir a entrenar y jugar se hiciera realmente duro. Pero a pesar de eso me mantenía optimista. Había una gran unión con mis compañeros, todos nos llevábamos muy bien y eso ayudaba en el día a día. Al final de la liga, ya recuperado, tuve oportunidades de jugar bastante lo que me ayudó a crecer como jugador.
La mayoría de los entrenadores que has tenido te definen como “la polivalencia hecha jugador de baloncesto”: por tu posición natural de “3”, pero tu buen hacer de escolta, y hasta de base. ¿Tú en que puesto te ves?
Hasta los 18-19 años siempre jugué de base, y creo tengo –y tendré– esta mentalidad de base. Pero por otro lado sigo creciendo como jugador en distintas facetas En lo personal, me da igual en que posición juegue. Creo que el baloncesto no cambia con los puestos, el balón sigue igual, la cancha, las canastas, nada cambia. Mientras pueda jugar, no me importa en que posición lo haga. Soy un jugador que si bien no es especialista en nada, hace de todo un poco dentro del campo.
Eres un jugador joven, talentoso con técnica y conocimiento del juego… ¿Qué es lo que te falta para dar el paso a la ACB?
Para llegar a lo más alto del baloncesto hace falta talento y un poco de suerte. Antes la defensa era mi punto débil, hoy por hoy estoy trabajando duro para mejorar ese aspecto y creo que lo estoy consiguiendo. También debo mejorar mi tiro, con un tiro exterior más o menos fiable seré un jugador mucho más completo. Espero poder mejorar esas cosas y tener un poco de suerte para lograr el paso a la ACB.
Ahora estas militando para el UB La Palma y tienes opción a otro año de contrato ¿Qué vez en el Club que te motiva a quedarte allí? ¿Cuáles son los objetivos del equipo?
Creo que el UB La Palma es el equipo ideal para mí porque juego muchos minutos y así puedo desarrollar mi juego. El objetivo del equipo desde principio es lograr la salvación, y creo que estamos cerca de poder cumplir ese objetivo y a lo mejor pelear por algo más.
¿Cómo es Domingo Rodríguez como entrenador?
Es un entrenador joven con muchas ganas y seguro que tendrá una carrera exitosa.
¿Te gusta la Isla?
La isla es muy pequeña y muy bonita. No hay mucho que hacer pero estoy a gusto. La afición nos ayuda mucho cuando jugamos en casa, y eso se refleja en los resultados que tenemos jugando de local donde hemos ganado la gran mayoría de los partidos.
Se viene el choque contra el CB Valladolid, ¿Cómo se están preparando para el partido? ¿Cuál crees que es el punto donde atacar para poder conseguir la victoria?
Valladolid esta teniendo una temporada maravillosa. Tienen un equipo con grandes jugadores que te pueden ganar partidos solos. Es difícil encontrar una manera para ganarles, tenemos que jugar a nuestro mejor nivel y esperar que ellos también tengan un día con menos acierto.
¿Eres de esos jugadores que sigue las distintas ligas y que los domingos mira los partidos de ACB?
Si, soy un fanático del baloncesto. Lo llevo en las venas. Ha sido parte de mi vida desde pequeño, por eso me paso todo el día viendo baloncesto por la televisión.
Nos han contado que tanto amas el baloncesto que hace unos años te has echado de pareja a la hermana de Berni, a quién desde la página aprovechamos a saludar ya que hemos tenido la oportunidad de conocerla en Huelva ¿Cómo es tener de cuñado a una estrella del baloncesto español?
Berni es una persona muy muy amable. Desde que vine a Málaga me ha ayudado muchísimo, incluso a encontrar una novia jejeje. Es una persona familiar y se lleva bien con todo el mundo. Le encanta hacer bromas sobre mi país, aunque estoy seguro que si fuera algún día, lo callaría. Por lo general, no solemos hablar mucho de baloncesto ya que tenemos suficiente los dos con entrenar cada día.
PIN-PON:
Un jugador: Bodiroga
El quinteto de la LEB Oro: Chris Hernandez, Ross Schraeder, Fede Van Lacke, Thomas Terrell, Brian Cusworth.
El baloncesto es para mí: Lo es todo.
Un partido para no olvidar: Mi primer partido jugando con mi padre.
Una anécdota: Un compañero en Francia, una vez se llevo dos zapatillas del mismo pie a un partido. Y el pobre jugo así, no se cómo, pero aguanto.
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